Desde Granada, ciudad embrujada os saludo y deseo que pasen un momento agradable en este espacio donde expreso mis sentimientos vividos en este Otoño Granadino.
MI INDIA NACIDA EN ABRIL Cuando las Líridas recién finalizan, para embellecer aún más el firmamento estrellado celestial, naces tú, india de Abril. En el canto primaveral, cuando el ruiseñor deja sus trinos a modo de melodías misteriosas que asemejan música celestial variada, naces tú india de Abril.
Cuando se percibe en el ambiente perfumenes que embriagan los sentidos, aromas a rosas, celindas, azahares y gardenias, naces tú, india de Abril. Cuando las flores de los jardines adquieren mil tonalidades figurando arcoiris vivientes, pasando del rosa al lila incluido el blanco de los rosales inmaculados, naces tú india de Abril. Cuando las flores hablan su lenguaje y representan emociones como el rojo de amor, verde como la ilusión y esperanza, el azul como la tranquilidad y la paz, el blanco como la inocencia y pureza, naces tú india de Abril. ¡ Oh, India sin igual ! Dime tú quién me ha robado éste mes de Abril del que tantos sueños guardo, esperanza e ilusiones atesoro y que aun me dan vida.
Querida amiga Vicky Te deseo mi mas sincera y cálida felicitación en en día de tu cumpleaños, y pases un día lleno de paz, alegría y felicidad junto a los tuyos. Pido a nuestro Dios te conceda muchísimos años, más de cien, llenos de salud y toda clase de bienes. Bendiciones con mi abrazo fratenal Jose Ignacio
Porque mis palabras son pausadas ... y me agradan. La música también debe de ser pausada Al igual deben de ser pausados los besos que en estos momentos igualmente te daría.
Las teclas de éste órgano se asemejan a tu piel que de igual manera suavemente acariciaría.
Porque todo lo anterior debemos olvidarlo porque es algo estúpido. Porque si pronuncio las palabras te quiero es verdad.
Porque pausadamente me viene a la memoria tu recuerdo, como teclas en movimiento pausado y rítmico que inmaculadas nunca llegaré a tocar.
¡ Moriré ! Y esas teclas seguirán moviendose a ritmo dulce y alegre. Desde mi lecho eterno llegarán los sonidos de esta melodía que hoy domingo percibo y te dedico, como si tu me la enviaras con tus teclas de amor secreto.
OCASOS INALCANZABLES Presiento como liviano y suave me llega el rugir del viento que se rompe en las montañas como música de arpa a modo de diapasón divino. Percibo y aprecio henchido mi corazón colmado , como arcoiris en esa inmensa lejanía. Crepúsculos eternos, rayos dorados que dejan plasmados y fotografiados en el más allá del laberinto de mi alma. Brisa de aire frío que hiela anestesia y rompe mi rostro. Lágrimas que afloran y distorsiona los rayos emitidos por ese sol cansado y mústio y que pronto morirá por poniente.
Porque intuyo que más allá estas tú. Junto a ese haz de rayos que se acercan al infinito. Siento el aletear del alma y escucho tu lejana mirada que traspasa ese horizonte y esas altitudes montañosas ¡Ay, Río Colorado fiel testigo de tanta sangre indígena. Siento tu lejana mirada caer en el abismo vertiginoso, en ese ocaso divisionado que marca la linea tangencial del amor y desamor Azules diversos, confundidos y a la vez unificados pero que con tu alegría innata roban a ese cielo tanto azul Flor roja, otras veces fucsia y para las inmensidades bien amarilla. Aquella mirada pensativa que nadie y tan solo tu podrá saber y descifrar Pero que sí hace intuir que sin esperanza y fe ya no existe nada.
Soy el alma solitaria esa alma que divaga y deambula, errante y perdida que habla sola. Soy el alma silenciosa, la que calla, porque no encuentra la palabra de nadie que le escuche y conteste.
Soy, sí, el alma solitaria esa alma anónima, una más de las muchas que existen soy quizas el alma errante la que demanda sed
Encontre, como tantas almas parecidas y semejantes a la mía, mil fuentes con agua, de fácil acceso, por caminos llanos y sin dificultad. He bebido muchas veces... mas nunca se calmó mi sed, ni quedé saciado.
Hoy mi alma nuevamente pide ayuda, mas nadie se apiada. ¡Sí, mi alma precisa encontrar agua ! Agua que verdaderamente calme mi sed .
Sí, quiero encontrar el camino difícil, caminar por el camino árido del desierto, pedir agua al Profeta y que me diga: Soy yo el Profeta que buscas.
Sí, quiero encontrar esa roca solitaria en el desierto. Sí quiero encontrar a ese Moisés que golpee la roca , nunca mejor dicho, y brote esa agua verdadera, la que da vida, la que limpia y a la vez calma la sed.
Sí, quiero beber agua pura, de la que emana de la fuente auténtica de la herida del costado de Jesucristo. La única que realmente sacia y calma la sed de todos los humanos.